Es importante sembrar la semilla de la modestia en las niñas desde pequeñas. En primer lugar con el ejemplo de la madre ellas aceptarán la modestia. Pero en segundo lugar ya que somos nosotros quienes elegimos la ropa de las niñas cuando son pequeñas es importante saber elegir con buen criterio y buen gusto.
Un niño no es un adulto en miniatura. A veces en la moda infantil actual se fomenta que las niñas sean vestidas con artículos que más favorecen a las mujeres adultas, fomentando su vanidad y sobre todo fomentando que ellas quieran imitar cierto tipo de modelos.
También la moda fomenta desde las pequeñas el usar minifalda o ropa "provocativa" lo cual a los adultos les parece tierno y gracioso pero más tarde se escandalizan cuando estas niñas crecen y se vuelven atrevidas en su vestir.
Las niñas deben vestir como niñas, con ropa que las haga ver femeninas, les conserve el pudor y la inocencia natural de su edad.
Otra recomendación es que sea ropa cómoda, faldas o mejor aún vestidos largos un poco arriba del tobillo, que les permitan correr, trepar, y jugar con soltura.
Aquí hay algunos ejemplos:
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